martes, 1 de junio de 2010

Entre la belleza y lo maldito: el Edificio Dakota.

Este emblemático edificio de Manhattan se construyó entre 1880 y 1894, inspirado en el estilo francés de arquitectura característico de la época. Su enorme entrada se debe a que por ella debían pasar los coches de caballos. Aunque la disposición de las habitaciones ha ido cambiando con los años, sigue conservando sus largas estancias, algunas de 15 metros, y sus techos de 4,30 metros de alto, tan característicos de las casas antiguas. Su fachada es impresionante, adornado suntuosamente por pequeñas cúpulas en el tejado, de color negro, que contrasta con el beige del resto del edificio. Son igualmente hermosos sus balaustradas y balcones que crecen sobre su escarpado tejado, inspirado en el Renacimiento Alemán.



El edificio y la historia que lo acompañan han hecho que acabe convirtiéndose en uno de los referentes turísiticos de Nueva York, pero también que se considere como un lugar "maldito". Aunque en él vivieron figuras de la talla del mítico actor de películas de terror Boris Karloff o del compositor y director de orquesta Leonard Berstein, entre muchos otros, otro de sus míticos habitantes fue Aleister Crowley, el conocido ocultista. A su leyenda negra se suma el hecho de que fue a sus puertas donde John Lennon fue asesinado. Y finalmente, para culminar, fue aquí donde se rodó la famosa película de Roman Polanski, "La Semilla del Diablo".



No hay comentarios: